martes, 27 de septiembre de 2011

Don J. Jesús

El día de hoy es cumpleaños de mi papá... bueno, no... bueno, si... bueno, más o menos. El asunto es que si hablamos de mi papá, podría decirles que su vida a estado repleta de situaciones muy particulares que sumadas engranan una rara y divertida novela.

Vamos a empezar, mi papá nació el 28 de septiembre de 1943, sin embargo mi abuelita asegura que mi abuelo, Heliodoro Biseño II, al enterarse del nacimiento de su primogénito (al menos oficialmente) se puso tan contento que juntó a todos sus compitas y se lanzaron acto seguido a alguna cantina o centro botanero, que supongo debió de haber sido como el Voga de esos tiempos, a festejar el acontecimiento. Mi abuelo, Lolo (como se rumora que le decían de cariño) agarró la fiesta como mirrey en toldo del Pricess, no sin antes asegurarse de que dentro de el entourage que lo acompañaba, se encontrara el juez del registro, pa' que obviamente le hiciera paro con el acta de nacimiento y mi padre cumpliera desde la cuna con sus obligaciones civiles.

El pasaje que les acabo de relatar, muestra de manera muy gráfica la manera ancestral de ser que tenemos los Briseño: una bonita y festiva mezcla entre desmadre y responsabilidad. OOOOBVIAMENTE las cosas a veces no salen exactamente como las planeamos y el resultado de la logísitca natal de mi abuelo fue que mi papá quedó registrado como nacido el 21 de septiembre; y eso no es lo mejor, en la Fé de bautizmo mi papá se llama Jesús Heliodoro Briseño Becerril y en su acta de nacimientole pusieron J. Jesús Briseño Becerril, si, JOTA PUNTO Jesús Briseño Becerril. Hasta la fecha aún hay varias líneas de investigación abiertas, donde se sugiere que mi papá realmente podría llamarse José, Juan, Jaime, Jonás, Julio, Jacinto, Jeovanni, Jack, James, Jaquichán, o que simplemente al escribano se le fue el dedo y puso una "J" de más.

Unos 60 años después, la vida de mi papá siguió contando con eventos igual de inverosímiles, algunos casuales y otros provocados por el mismo....









 Empecé a escribir este post el 21 de septiembre (toda la parte de arriba) y la idea era poner a continuación una de las tantas historias de mi sacrosanto padre... sin embargo, hoy 28 de septiembre, borré lo que llevaba escrito y decidí no ponerla., tiene tantas, que sería injusto escoger sólo una y nominarla así por que sí como LA historia; así que por el momento dejémoslo así, ya habrá oportunidad de irselas contando, mientras que para los que lo conocen, seguro ya tendrán elegida su favorita (se aceptan sugerencias) y yo dejaré este post, haciendole honor a su protagonista: extraño, pero a la vez encantador.

Saludos